Terminan Toros de Moroleón viernes “En Paz”
MOROLEÓN, Guanajuato (TorosdeTijuana-Armando Esquivel) 16 de octubre del 2016 – Los Toros de Moroleón terminaron el sábado “En Paz” luego de acudir a la Santa Misa que encabezó el Sacerdote Francisco Javier Eliuth Ramírez Galván, en el Templo del Señor de Esquipulitas de la Parroquia de San Juan Bautista.
El Padre, quien confesó haber sido futbolista profesional, los conminó a hacer de la disciplina su arma principal, así como convertir el compromiso de trabajar en equipo ya que es un esfuerzo que les permitirá cumplir con los objetivos.
“Yo jugué futbol profesional y sé lo que significa la disciplina, que será muy importante para ustedes dentro y fuera del campo; cada uno de ustedes tiene diversas cualidades que tendrán que utilizar a favor del equipo, recuerden que lo más importante es el triunfo en equipo”, les dijo el prelado.
En la celebración religiosa estuvieron presentes Jorge Ortiz, Presidente Municipal de Moroleón y su familia, así como directivos, cuerpo técnico y todos los jugadores de Toros de Moroleón.
El Sacerdote aprovechó su sermón para exigir a todo el equipo un “compromiso vital” de cada uno hacia todos los elementos que integran el plantel, recordándoles que sólo triunfa quien se prepara.
“No estrenen el uniforme si van a andar de borrachos, no serán dignos; recuerden que las victorias no van a llegar sólo por la Gracia de Dios; sólo triunfa quien se prepara; ojalá no los ponchen tan seguido, pero sobre todo, ojalá que Dios no los vaya a ponchar”, remató el Padre.
En su oración el prelado pidió para que la fortaleza física y mental les sea concedida tanto al equipo, como a sus familiares.
“Aléjalos de todo tipo de adicciones y de ese veneno que son los comentarios malsanos contra un compañero; a los familiares dales la fortaleza porque mucho depende de ellos”, pidió el Sacerdote.
El conjunto con sede en la “Capital Textil de México” abrirá mañana la campaña 2015 de la Liga Invernal Mexicana con un duelo en calidad de visitante contra Tuzos de Guanajuato.
Al final de la Santa Misa, los Toros de Moroleón salieron del templo en paz.
