TIJUANA, Baja California (TorosDeTijuana.com-Armando Esquivel) 11 de septiembre del 2017 – Y los campeones regresaron a su casa
Los Toros de Tijuana, flamantes monarcas de la Liga Mexicana de Beisbol, volvieron a los amigables confines del estadio Gasmart, pero no se presentaron con las manos vacías, ya que en sus maletas trajeron, desde Puebla, la codiciada Copa Zaachila que los acredita como los reyes de la pelota mexicana.
El conjunto fronterizo venció el domingo a Pericos de Puebla para obtener el primer título en su historia, tras dominar la Serie del Rey cuatro juegos a uno.
Una magna fiesta esperaba a los nuevos soberanos del beisbol nacional, en el inmueble que descansa bajo las faldas del Cerro Colorado, donde más de diez mil personas se hicieron presentes para ser parte de la celebración que inició a las 19:00 horas sobre el terreno de juego.
Desde dos horas antes del evento, las puertas del estadio abrieron y todos los asistentes pudieron tomarse la foto con el trofeo de campeones que descansaba junto a los dos títulos de la Zona Norte que ya tienen los “bureles” en sus vitrinas.
La conmemoración dio inicio con la parte musical a cargo de la Banda San José para luego dar paso al protocolo sobre el escenario que se montó sobre la zona de segunda base y que inició con la presentación de la directiva que encabeza Alberto Uribe Maytorena, presidente del consejo de administración del Club de Beisbol Toros de Tijuana.
Uribe estuvo acompañado por su familia y por la Primera Dama Brenda Raucho de Vega, así como por toda la directiva del club.
El gran templete se fue poblando poco a poco cuando el llamado de los jugadores inició y uno a uno fueron haciendo su pasarela de campeón por en medio de un túnel que formó la gente desde el dugout de la primera base hasta el escenario.
Ya con todos los jugadores apostados en el centro de los reflectores y la celebración, cerró el desfile el manejador Pedro Meré, quien hizo el recorrido cargando la Copa Zaachila y al subir al estrado entregó la corona a Alberto Uribe Maytorena y su familia.
Varios jugadores aprovecharon para hacer uso de la voz a nombre de sus compañeros, entre ellos el “capitán” Óscar Robles, quien se despidió por última vez de la afición de la ciudad que lo vio nacer y lo hizo cargando el trofeo de campeón, un último sueño hecho realidad.
“Esa camiseta se defiende con el corazón y este trofeo es el mejor regalo que me pudieron haber dado mis compañeros; los voy a extrañar mucho; este campeonato se lo dedico a mi familia, mi esposa, mis hijos, mi papá, hermanos y a mi mamá”, mencionó.
Jorge Cantú también agradeció a la afición por todo el apoyo y aseguró que el apoyo que la gente rinda en Tijuana no lo había sentido en toda su carrera como beisbolista y Christopher Valencia hizo lo propio, antes de que cerrara el protocolo Dustin Martin con un discurso en español para la afición.
“Ahora soy “San Martín”, gracias por ser la mejor afición de todo México, antes éramos los “Reyes del Norte”, pero ahora somos los “Reyes de todo México”, comentó.
La velada continuó con fuegos artificiales, luces, música y baile con la presencia de las mascotas “Toro Torín”, “Chango 0T” y “Nacho el Gallo”.
Fue una temporada larga, pero el día era para festejar, para vitorear a los jugadores y para celebrar con la fiel afición el primer campeonato de Toros de Tijuana en la Liga Mexicana de Beisbol.
Mañana será ya tiempo para pensar en la campaña 2018 y en el bicampeonato.